¿Qué es compliance?

Compliance (cumplimiento en español) es un término inglés que se refiere al cumplimiento normativo por parte de las organizaciones empresariales o de otro tipo. Esto es, al cumplimiento de las normas externas e internas que afectan a la organización y a sus miembros en el desarrollo de sus actividades.  

¿Para qué sirve compliance?

La finalidad del compliance es evitar las consecuencias negativas derivadas de incumplimientos de las normas para estar mejor valorado por las comunidades que acogen la actividad que lleva a cabo la organización lo que aboca a un mayor éxito de esta.

Ejemplo de compliance

Si Volkswagen hubiera cumplido con la normativa sobre emisiones contaminantes y llevado a cabo de forma adecuada los controles técnicos necesarios se podría haber ahorrado las millonarias multas impuestas a la compañía por países como Estados Unidos (4.300 millones de dólares), Alemania (1.200 millones de dólares) Australia (86 millones de dólares) o Polonia (36 millones de dólares). Se podía haber ahorrado los millonarios pagos a los propietarios de los vehículos afectados y a los concesionarios. Y esto por no hablar de los costes en términos reputacionales y de otras responsabilidades depuradas, entre ellas las penales de miembros del fabricante.

Es muy importante el cumplimiento de las normas y evitar así las posibles consecuencias derivadas de incumplimientos.

Riesgos de compliance

Cuando llevamos a cabo una actividad empresarial asumimos ciertos riesgos, que llamaremos riesgos de compliance, de que se produzcan incumplimientos normativos. Los riesgos de compliance pueden tener consecuencias negativas en caso de materializarse en incumplimientos.

¿Cuáles pueden ser las consecuencias de los riesgos de compliance?

  • Sanciones de carácter penal o administrativo, pueden ser multas o de otro tipo, pensemos por ejemplo en la pérdida de una licencia o en el cierre de la actividad.
  • Pérdidas económicas directas consecuencia de las indemnizaciones y compensaciones a aquellos, ya sean clientes u otros stakeholders, que han sido perjudicados por los incumplimientos de la organización.
  • Pérdidas reputacionales como consecuencia de la publicidad de la mala praxis de la organización cuya difusión resulta rápida y sencilla a través de las redes sociales. Conseguir una buena reputación y el valor de la marca suele costar mucho tiempo y esfuerzo, pero perderla podría ser cuestión de unos minutos. Las pérdidas económicas derivadas de una mala reputación pueden ser las peores.
  • Agravios a terceros ya sean interesados directamente en la organización como empleados, proveedores, inversores, clientes, o aquellos con intereses indirectos como son los gobernantes o en general los miembros de la comunidad en la que la organización lleva a cabo su actividad.

Ventajas de compliance

Sin embargo, si evitamos incumplimientos de las normas y contamos con una buena valoración de la comunidad donde se desarrolla la actividad empresarial tendremos ventajas competitivas que llamaremos ventajas de compliance.

¿Cuáles son las ventajas de compliance?

  • Atraeremos clientes.
  • Estaremos en buena posición para concurrir a concursos públicos.
  • Atraeremos accionistas e inversores.
  • Contaremos con el aprecio de los proveedores.
  • Seremos valorados positivamente por las instituciones financieras.
  • Estaremos en buena posición a la hora de contratar todo tipo de productos o servicios como por ejemplo seguros con las compañías aseguradoras.
  • Afianzaremos la continuidad del negocio a largo plazo.
  • Evitaremos las consecuencias negativas derivadas de incumplimientos: sanciones, indemnizaciones y compensaciones, pérdidas reputacionales o agravios a terceros.

¿Qué normas hay que cumplir?

Hay que cumplir tanto las normas externas como las internas.

Las normas externas son aquellas que nos vienen impuestas como las leyes del lugar de actividad, las normas de rango inferior o las regulaciones sectoriales.

Son normas internas aquellas impuestas por la propia organización para sí y para sus miembros como los códigos éticos y de conducta, las políticas internas o los compromisos adquiridos.

Las normas que hay que cumplir se pueden clasificar en áreas legales. Las áreas legales habituales dentro del cumplimiento normativo son:

Corrupción

Competencia

Medio Ambiente

Protección de Datos

Fiscalidad

Además, se deben cumplir las normas sobre riesgos laborales y aquellas que se refieren a la protección de consumidores y usuarios.

Normas penales

Con independencia del área legal las normas externas que hay que cumplir pueden ser normas penales. Esto es, normas cuyo incumplimiento conlleva una pena o medida de seguridad y que aparecen recogidas en el Código Penal o en una ley penal especial. Para referirnos al cumplimiento de las normas penales utilizaremos el término Compliance Penal que explico en la página correspondiente.

¿Cómo se consigue compliance?

Para conseguir que la empresa u organización tenga éxito en la tarea de dar cumplimiento a las normas se utilizan los Programas de Compliance que son explicados en la página referida a ellos.